Lo que voy a contar ahora es una de esas cosas que no está bien hecha, pero la hice.
No hay que llevar animales silvestres a casa, no están hechos para vivir encerrados, ni se comportan como mascotas. Lo más habitual es que si traes un animal silvestre a casa se te morirá. Por eso, si has encontrado algún pollo, algun animalico herido en el campo o lo que sea lo que puedes hacer es: llamar a los agentes que se ocupan de ellos o dejarlos allí por muy cruel que parezca.
Una vez dicho esto os cuento el caso.
Pitxi era un polluelo de gorrión sin plumas, feucho y con unos dos días de vida. Se cayó del nido y su futuro estaba escrito.
Yo había salido de currar, un día horríble, había tenido riña con la jefa y necesitaba airearme. Así que me fuí a dar un paseo y me encontré a Pitxi.
Sabía que no había que hacerlo, no hay que coger polluelos de gorrió e intentar cuidarlos. Los gorriones son muy silvestres, pero que muy silvestres, y necesitan mucho espacio y libertad, si no se agobian y hacer cualquier cosa para escapa, asta matarse. Además, cuando un pollo cae del nido, si el pollo tiene plumas, los padres siguen cuidando de él, así que no hay que cogerlo, ya tiene familia!
Yo lo cogí.Miré en internet y ví que la gente cría los pollos de pájaros con una papilla que se compra en farmacia. Pero la silvestrada hay que hacerla, y la hice, en vez de comprar la papilla leí que también era bueno darles comida de perro remojada. Además dejé al pajarillo en una caja envuelta con papel de bater encima del módem, que se suele calentar. Si no fuera por el módem no se si Pitxi estaría vivo.
Con el cuidado de día a día, llenando el buche del pajarico (comía una barbaridad, yo pensaba que iba a explotar) y aguantando los gritos poco agradables, Pitxi creció y hoy está aquí cagando por todos lados y volando de un lado al otro de la casa.
Alguna vez la he llevado a la calle pero igualmente todo le da miedo, asi que no se me despega de encima.
En julio hará dos años, ya veremos como sigue la cosa.
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